lunes, 17 de septiembre de 2012

Las arcas públicas españolas ingresan casi dos euros por cada uno que invierten en educación universitaria





Recortar en el gasto para educación, lejos de ayudar a equilibrar las cuentas públicas, las castiga. El dinero que se destina a fomentar la formación más allá de la educación básica no solo se recupera,  a la larga permite a las arcas del Estado un ingreso por encima de lo invertido. Conclusión: las políticas de austeridad se equivocan apuntando a la educación pública como objetivo de los recortes. Según el último informe elaborado por la OCDE bajo el nombre Situación de la Educación 2012, por cada euro público destinado a apoyar la educación superior en España, el Estado recupera entre 1,62 y 1,9 euros. Y por cada euro destinado a formaciones de grado medio, se recuperan 1,6.

La cuantía es mucho más elevada en la media de países de la OCDE, donde el retorno en la educación superior es de cuatro veces lo invertido en el caso de los hombres y de 2,5 veces en el de las mujeres.

Frente a la defensa de las políticas de ajuste, el presidente del organismo, Ángel Gurría, llama la atención a los Gobiernos al comienzo del estudio sobre el hecho de que “los contribuyentes son cada vez más conscientes de los retornos económicos y sociales de los fondos públicos destinados a apoyar la educación superior”.

El estudio de la OCDE demuestra una amplitud de miras muy superior a la que se está empleando en las políticas de austeridad impuestas al sur de Europa, que no han dudado en pedir expresamente recortes en educación a los países rescatados o en vías de estarlo. 

Si lo que se buscan son reformas estructurales, si la intención es modificar los cimientos del Estado del Bienestar para hacerlo sostenible a largo plazo como dicen, el recorte en educación es un palo en la rueda de las cuentas públicas. Otra cosa es que la intención de los cambios, arropada en las supuestas prisas por arrojar una cifra de déficit que le guste al mercado, no sea favorecer las cuentas públicas sino crear un ejército de mano de obra poco formada y por tanto barata a orillas del Mediterráneo.

Lee el artículo completo en cuartopoder.es

No hay comentarios:

Publicar un comentario